Hace ya algunos años surgió el boom de los ácidos para regenerar la piel. Los dermatólogos comenzaron a prescribir productos para aplicar topicamente ácidos y así estimular el proceso de regeneración cutánea haciendo que se revelara una piel nueva, con mucho menos manchas, menos líneas de expresión y cicatrices. De ahí, las clínicas de centros de salud y belleza también empezaron a hacer distintos tratamientos para renovar la piel y las marcas cosméticas empezaron a producir los productos para uso en casa.
Y, efectivamente este tipo de productos si hace lo que promete, los ácidos eliminan la primera capa de la epidermis y queda una piel nueva, luminosa, fresca. Sin embargo, esta renovación de piel forzada por agentes externos rompe el ciclo natural de regeneración cutanea por lo que si se hace sin el cuidado necesario puede afectar permanentemente el ciclo de regeneración de la piel, disminuir la epidermis, alterar las funciones de las células, sensibilizar la piel entre muchos otros daños.
Y aunque ser una opción ideal para mostrar una piel de bebé, te recomiendo que este tipo de tratamientos lo hagas muy esporádicamente y por periodos muy cortos (no mas de 2 meses) y siempre prescrito o aplicado por alguien experto. También te recomiendo que conozcas sobre los tipos de hidroxiacidos utilizados en la cosmetica para saber cuál es el indicado para ti.
Recuerda que sólo tenemos una piel y si la dañamos el efecto será por siempre.
spacioazul 